El trofeo García Calvo tuvo color granate

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Compostela y Pontevedra disputaron el trofeo García Calvo para conmemorar el sesenta aniversario de la SD Negreira. El encuentro fue muy igualado e intenso pero al final la balanza cayó a favor del equipo de la capital del Lérez, 0-1.


Yago Iglesias afrontaba este partido con la intención de seguir rodando al equipo ante un rival importante, así como para mejorar los números y las sensaciones de la pretemporada. El entrenador de Ribeira puso sobre el césped nicrariense a Edu Sousa bajo palos, a Churre y Mario Gómez como pareja de centrales, Ángel Bastos y Zabaleta como laterales derecho e izquierdo respectivamente; como mediocentros defensivos a Samu Mayo y Borja, por la izquierda a Alex González y por la izquierda a Barbeiro, quedando Rufo como referencia en el ataque.
Por su parte Manel Menéndez afrontaba este encuentro en medio de una maratón de amistosos, siendo este el tercer encuentro de la presente semana. En el once que puso en liza el técnico asturiano destacó la presencia de Samu Araujo, que fue el último fichaje en casa ‘Compos’. Así, puso como guardameta al juvenil Brais Rodriguez, a Soto y Jorge Sálamo en el eje da la zaga, Samu Araujo y Riki Mangana como laterales izquierdo y derecho respectivamente; Pablo Antas y Antón de Vicente como pareja de mediocentros, por delante a Jaime Santos; por la derecha Pep Caballé y por la izquierda el canterano Hugo Matos, como ‘nueve’ estuvo Manu Barreiro.

Igualdad en el primer acto

El encuentro comenzó con los dos equipos intentando tener la pelota y alternando el dominio del balón, en esos minutos la mayor parte del partido discurría en el centro del campo, había muchas disputas de balón pero pocas llegadas al área rival. A pesar de ello Manu Barreiro se hizo con la pelota después de una mala salida de balón por parte del Pontevedra, el delantero compostelano se planta sólo ante Edu Sousa escorado un poco a la derecha, no decide tirar a puerta pero sí pasarle el balón a Pep Caballé pero el esférico no llega al extremo del Compostela y el balón se termina yendo por la línea de fondo.

Los de Manel le acababan de perdonar la vida al Pontevedra, demostrando una cierta negadez de cara el gol. Con el paso de los minutos los granates se empezaban a adueñar del balón pero era una posesión estéril ya que no creaba peligro sobre la portería defendida por Brais Rodríguez. La primera llegada con peligro para los de Yago Iglesias fue sobre el minuto veinte de juego provocado de un mal despeje de Jorge Sálamo, el balón cae a la banda derecha del ataque pontevedrés, ahí estaba Barbeiro, que fue quebradero de cabeza para la defensa del Compostela, manda un centro al área pero la defensa del Compostela termina maniatando el ataque. Los de Manel responderían ese ataque con llegadas al área pero unas veces esos ataques eran neutralizados por los centrales granates y otras veces el Compostela fallaba el último pase.

Pasado el minuto treinta de encuentro el Pontevedra dispuso de otra ocasión de peligro mediante un disparo desde la frontal del área, la ocasión más clara para los granates en la primera mitad fue un mano a mano de Rufo ante Brais, pero el delantero madrileño realizó un disparo muy flojo que no puso en aprietos al guardameta blanquiazul. El Compostela dispuso de otra ocasión clara de peligro a través de un ataque por su lado izquierdo, Hugo Matos y Samu Araujo realizan una serie de combinaciones plantándose dentro del área granate llegando a las inmediaciones de Edu Sousa, pero finalmente los centrales terminan despejando el balón. Así se llegó al final de la primera mitad, en general se estaba viendo un choque muy igualado en el que el partido se podía decidir por un pequeño detalle; en el Compostela Pablo Antas y Antón de Vicente estaban haciendo un gran trabajo de contención y de control del juego.

Los granates terminaron por marcar y hacer bueno el tanto de


A la salida de los vestuarios Manel introdujo cambios para seguir rodando a sus jugadores lo que benefició al Pontevedra que se adueñó de la pelota y ganaba la batalla en el centro del campo. Manel retiró a Pablo Antas, Antón de Vicente y a Jaime Santos, en su lugar puso a Fer Beltrán y a Jordan, también puso a Juampa por la izquierda y a Parapar por la derecha. En el inicio de la segunda parte el Pontevedra fue superior al Compostela, que tenía poco la pelota y le costaba salir con el balón jugado debido la presión de los de Yago Iglesias. Así las llegadas granates empezaban a ser constantes, al Compostela le tocaba sufrir, la mayoría de jugadas de peligro del Pontevedra venían de las botas de su extremo derecho Barbeiro que hizo estragos en la defensa del Compostela.

Los de Manel en esos minutos creaban escaso peligro sobre la portería de Edu Sousa en jugadas de contraataque, pases de Jordan buscando una carrera de Juampa o entre los defensas buscando a Manu Barreiro. Yago Iglesias que apenas moviera el banquillo en lo que iba de encuentro, avanzada la segunda parte puso sobre el verde a Charly jugando a la par con Rufo, estando el jugador de Ares de media punta y el madrileño seguía como jugador más adelantado. Sobre el minuto setenta de partido un centro al área desde la derecha, acompañado de una serie de combinaciones a la altura del punto de penalty, el balón le llega a Benjamín Garay que saliera en la segunda mitad y la manda al fondo de la red poniendo el 1-0 en el encuentro.

El Compostela en el arranque de la segunda parte bajó el nivel con respecto al primera mitad. La victoria del Pontevedra por lo visto en esos minutos del segundo tiempo estaba siendo justa. Con el paso de los minutos el partido se volvió a nivelar el Compostela volvía a ganar un cierto protagonismo con el balón y a llevar el peso del encuentro. A los de Manel en esa fase del encuentro le faltaba profundidad, entre otras provocada por la falta de entendimiento con sus referencias en el ataque, primero con Manu Barreiro y después con Fran López. En la segunda parte el Compostela dispuso muy pocas ocasiones claras de gol, la más clara fue sobre el minuto noventa después de un pase de Parapar a Fran López que estaba en el punto de penalty pero su remate termina rebotando entre los defensas y se va fuera. Los de Yago Iglesias estaban jugando ya a ‘guardar la ropa’.

Al final el encuentro terminó con victoria para los de Yago Iglesias y derrota para los de Manel que están teniendo un registro goleador muy bajo en esta pretemporada, lo que demuestra que aún hay mucho trabajo por delante.
Una de las notas positivas en el Compostela es el rendimiento del central Jorge Sálamo que con sólo quince años está gozando de muchos minutos en esta pretemporada para Manel, se muestra como un jugador valiente con la pelota y sin ser muy corpulento hace muy buenos marcajes a los delanteros rivales.