Abel Caballero desafía a Louzán: exige transparencia sobre las sedes del Mundial 2030 y amenaza con ir a los tribunales

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El alcalde de Vigo acusa al presidente de la RFEF de falta de claridad en la elección de las ciudades anfitrionas y exige la publicación de las puntuaciones oficiales.

La polémica en torno a las sedes seleccionadas para el Mundial 2030 no da tregua, y Vigo se sitúa en el centro del debate. Abel Caballero, alcalde de la ciudad, ha lanzado duras críticas contra Rafael Louzán, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), exigiendo que haga públicas las puntuaciones que determinaron qué estadios formarían parte del evento.

El alcalde no se quedó ahí y advirtió que está dispuesto a llevar el caso a los tribunales si no se garantiza la transparencia. Según Caballero, el estadio de Balaídos, que fue renovado recientemente y cuenta con potencial para ampliar su capacidad, fue descartado injustamente como sede.

Caballero pide explicaciones: «No aceptaremos mentiras ni ocultaciones»

En declaraciones a la prensa y en una entrevista con la Cadena Ser, Caballero fue contundente:
«Le exijo a Louzán que diga con qué criterios Vigo quedó fuera. No pedimos favores, pedimos claridad. Si los datos son correctos, no habrá más que hablar. Pero ocultar esta información solo genera sospechas y perjudica a nuestra ciudad.»

El alcalde también desmintió afirmaciones hechas por Louzán sobre la capacidad del estadio de Balaídos:
«Dijo que nuestro proyecto era de 27.000 espectadores, lo cual es falso. Con las ampliaciones previstas, habríamos alcanzado 43.500 asientos. Estas mentiras dañan a Vigo y muestran un claro sesgo en nuestra contra.»

Una lucha por la transparencia que podría llegar a los tribunales

La tensión entre ambos dirigentes no es nueva, pero este último episodio ha elevado el tono de la disputa. Caballero asegura que no permitirá que la falta de transparencia quede impune, y ha dejado claro que, si es necesario, recurrirá a la vía judicial para esclarecer lo sucedido.

Por su parte, Louzán ha evitado responder directamente a las acusaciones del alcalde, aunque ha defendido previamente que las decisiones se tomaron basándose en criterios técnicos. Sin embargo, en Vigo se percibe esta exclusión como una decisión arbitraria que perjudica a la ciudad y sus aspiraciones deportivas.

El futuro de Vigo en el panorama deportivo

Mientras continúa la controversia, los habitantes de Vigo apoyan mayoritariamente la postura de su alcalde y esperan que la ciudad reciba el reconocimiento que, según ellos, merece. La lucha por la transparencia en torno al Mundial 2030 podría sentar un precedente sobre cómo se gestionan este tipo de eventos internacionales en España.