Adriano «Emperador» se confiesa: el exjugador brasileño reveló su lucha diaria con el alcoholismo y sus orígenes en las favelas.

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El exfutbolista brasileño narra su difícil batalla emocional en su nueva biografía.

Adriano Leite Ribeiro, conocido como “El Emperador”, ha conmocionado al mundo del fútbol al revelar aspectos inéditos de su vida personal y profesional en su libro Adriano, Meu Medo Maior, lanzado recientemente. La obra, escrita junto al periodista Ulisses Neto, recorre desde sus humildes inicios en las calles de Vila Cruzeiro hasta su ascenso a la élite del fútbol mundial, pasando por los momentos más oscuros tras la muerte de su padre.

El exdelantero, que marcó una época con su potencia y calidad en equipos como el Inter de Milán y Flamengo, desvela cómo el fallecimiento de su padre en 2004 transformó radicalmente su vida, sumiéndolo en un estado de depresión que afectó tanto su carrera como sus relaciones personales. “Me refugié en el alcohol para no enfrentar la tristeza. Era mi manera de evitar pensar en todo lo que me estaba pasando”, confiesa en el libro.

El exjugador brasileño reveló su lucha diaria con el alcoholismo y sus orígenes en las favelas.

La caída de un ídolo

El impacto emocional de aquella pérdida fue devastador. Aunque Adriano seguía mostrando destellos de su talento en el campo, fuera de él luchaba contra una profunda sensación de vacío. “A simple vista parecía que tenía todo: fama, dinero y éxito. Pero en realidad, estaba roto por dentro”, explica en uno de los capítulos más reveladores.

Durante su etapa en Italia, lejos de su familia y amigos, la soledad agravó su situación. “Tenía días en los que solo quería desaparecer, pero sentía que no podía mostrar mi vulnerabilidad porque todos esperaban que fuera fuerte. Era un peso enorme”, relata.

Un tema que no puede ignorarse: la salud mental en el deporte

Las declaraciones de Adriano reavivan el debate sobre la importancia de la salud mental en el mundo del deporte. Su historia es un ejemplo de cómo las presiones externas y los conflictos internos pueden afectar incluso a las estrellas más exitosas.

El brasileño, que se convirtió en un referente para millones de aficionados, ahora utiliza su experiencia para abogar por una mayor comprensión de estos problemas. “Es fundamental entender que detrás de un jugador también hay una persona que siente, sufre y necesita apoyo”, subraya en su obra.

Un mensaje de superación

A sus 42 años, Adriano se muestra reflexivo y comprometido con transmitir un mensaje de esperanza. Aunque sus días de gloria en el fútbol quedaron atrás, afirma que compartir su historia ha sido una forma de sanar. “Quiero que las nuevas generaciones sepan que está bien pedir ayuda. No siempre se puede con todo, y eso no te hace menos fuerte”, asegura.