Este domingo, el Pontevedra CF se enfrenta a un gran desafío en el Estadio de Pasarón. El conjunto granate recibe al Deportivo Fabril, el filial del Dépor, en un duelo que promete emociones y que podría marcar un punto de inflexión para el equipo de Yago Iglesias, que necesita reencontrarse con la victoria tras un inicio de temporada irregular.
El Pontevedra llega al encuentro después de una dolorosa derrota ante el Numancia y un empate frente al Compostela, resultados que han dejado a la afición con ganas de revancha y de ver al equipo levantar cabeza. Con solo cuatro puntos en tres jornadas, la urgencia de sumar de tres en tres es evidente.
El Fabril, un rival de entidad
El rival no será sencillo. El Fabril, dirigido por Óscar Gilsanz, ha demostrado una gran solidez en este inicio de campaña. Tras caer en su debut frente al Real Áviles (0-1), los coruñeses encadenan dos victorias consecutivas, la última frente al Compostela, con un 2-0 que les ha colocado en la parte alta de la clasificación con seis puntos. Además, el técnico blanquiazul ha apostado por la continuidad en el once inicial, una fórmula que le está dando frutos.
El Pontevedra, por su parte, deberá mostrar su mejor versión para frenar a un Fabril que ha encontrado en jugadores como Germil y Alfaro piezas clave para generar peligro. Aún queda en la memoria el empate de la pasada temporada en Abegondo, un resultado que apartó a los granates de sus aspiraciones de ascenso directo. Este domingo, Pasarón será testigo de un nuevo capítulo en esta rivalidad.
Además, la designación arbitral ha traído un curioso guiño del destino: Alonso Luíña, el mismo colegiado que pitó el contundente 4-1 a favor del Pontevedra ante el Fabril el pasado curso, será el encargado de impartir justicia de nuevo.
Para el Pontevedra, la consigna es clara: volver a la senda de la victoria, calmar las aguas tras las últimas jornadas y seguir adelante en un inicio de temporada lleno de altibajos.
