En los tres partidos disputados hasta ahora por el Pontevedra, los granates han anotado solamente dos goles, ambos de penalti. Sumado a la sequía goleadora que está viviendo el equipo hay que añadir la poca solidez defensiva mostrada hasta el momento. Los de Yago Iglesias han encajado gol en todos los partidos jugados hasta ahora
Tras un comienzo de pretemporada poco prometedor para el Pontevedra, la principal preocupación de los granates en la actualidad es la falta de gol. Si omitimos los dos tantos anotados desde los once metros, los lerezanos no han logrado penetrar la portería rival en ninguno de los tres partidos a través de jugadas o llegadas al área.
En busca de un nueve
Ni Rufo, Casais, o el recién llegado Charly, han sido quienes de anotar un gol en lo que va de pretemporada sin tener en cuenta el gol de Rufo frente al Racing de Ferrol desde el punto de penalti. Los granates están mostrando una sequía goleadora impropia de un equipo que aspira a estar en lo más alto de la tabla.
Hace días que en el Pontevedra se hablaba de aprovechar una «oportunidad de mercado» para cerrar la plantilla y cubrir la ficha senior que está vacante. Con las estadísticas en la mano, todo parece indicar que el club granate intentará lanzarse a por un nueve de garantía que pueda solucionar la ausencia de gol en el Pontevedra
Primeras preocupaciones
A pesar de estar todavía en pretemporada, los resultados cosechados hasta ahora por el Pontevedra han comenzado a levantar las primeras dudas sobre el rendimiento del equipo entre los aficionados. Bien es cierto que el equipo se está conociendo, es pretemporada, y los resultados no van más allá de lo anecdótico.
Sin embargo, la afición se espera más de un equipo diseñado para ganar la liga. Sin contar la derrota frente al Racing de Ferrol por ser un rival de mayor categoría, el Pontevedra ha perdido y empatado contra dos equipos de su misma liga, el Coruxo y el recién ascendido Racing Villalbés. La próxima prueba para los de Iglesias es este miércoles 9 de Agosto, en Carballiño, frente al Arenteiro.
