Entrevistamos a Juan Rodríguez y Marcos Pereiro, el dúo que lidera al conjunto de A Terra Chá desde el banquillo. ¡Ilusión a raudales!
Turno para Juan
P: ¿Cuál es la valoración que haces del equipo tras acabar esta primera parte del campeonato?
R: A principio de temporada nos marcamos el objetivo de competir y dar la cara en cada partido, que nuestros aficionados vieran un equipo competitivo fuese cual fuese el partido o el escenario, y creo que ese primer objetivo lo estamos cumpliendo. Creo que nos faltó convertir alguno de los numerosos empates en victoria para estar ahora mismo en una mejor situación clasificatoria, pero debemos seguir creciendo a partir de las sensaciones que ha dejado el equipo en cada partido.
P: La primera victoria de la temporada llegó hace pocos días ante el Escairón. ¿Fue un aspecto que te ocasionó muchos quebraderos de cabeza?
R: Sinceramente, creo que hasta ahora hemos conseguido ser un equipo con equilibrio emocional, consciente de que cuando se gana no se hace todo bien, y cuando se pierde no se hace todo mal. El día a día del equipo fue bueno cada semana, independientemente del resultado del fin de semana; podemos decir que las sensaciones eran mejores que los resultados, y eso hizo que nunca bajara el nivel de trabajo. No obstante, nos habíamos quedado muy cerca del premio en varias ocasiones, y en este momento sí que era de vital importancia sumar los tres puntos y romper esa barrera psicológica que, tras tantas semanas, sí podía empezar a pesar en el equipo.
P: ¿Cuál es el objetivo del equipo para lo que resta?
R: El objetivo es seguir creciendo pero partiendo siempre de esa base de equipo competitivo de la que hablaba antes; eso no lo podemos perder nunca. A partir de ahí, trataremos de dar un paso más respecto a la primera vuelta: hemos de hacernos más fuertes como locales y seguir mostrando una buena imagen a domicilio como hasta ahora. No pensar más allá del siguiente partido y buscar los tres puntos cada semana, viendo hasta dónde nos permite llegar al término de esta primera fase, sin mirar más allá.
P: ¿En qué aspectos el Santaballés es fuerte?
R: Seguramente este es un análisis que deberían hacer nuestros rivales. Lógicamente nosotros entendemos que tenemos nuestras fortalezas y debilidades, y tratamos de adaptarnos a ellas lo máximo posible. Si tengo que destacar una diría la capacidad para competir y levantarse ante las adversidades del grupo: un equipo muy comprometido, con mucho sentimiento de pertenencia y que tras cada momento difícil o contratiempo, ya sea en rachas de lesiones, puntos perdidos de manera dolorosa en los últimos minutos o de cualquier otra índole se ha repuesto con más ganas de trabajar y competir cada día.
Turno para Marcos Pereiro
P: Tras unirte en verano al staff técnico del Santaballés, Juan y tú formais uno de los grupos de trabajo más jóvenes y prometedores de la provincia de Lugo. ¿Cómo es trabajar con él?
R: Trabajar con él está resultando muy enriquecedor, es una persona muy abierta, a la que le gusta dialogar sobre todos los aspectos del juego. Pese a la juventud, es un técnico con gran bagaje en el fútbol regional y que, al igual que yo, afronta este reto con gran ilusión, por lo que el entendimiento está siendo total.
P: ¿Qué destacarías del Santaballés en lo que llevamos de campaña?
R: Destacaría el grupo unido que nos hemos encontrado, su gran valor humano y su buena predisposición para trabajar día a día, incluso cuando los resultados no acompañaron a las buenas sensaciones en el campo.
P: Tras haber jugado ya contra todos los equipos de vuestro grupo, ¿cuál ha sido el rival más completo?
R: Es difícil escoger uno. Por plantilla casi todo el mundo coincidirá en que Sarriana y Montañeros son favoritos. Mirándolo desde nuestra perspectiva, probablemente el rival que más dificultades nos planteó fue el Galicia Mugardos. En cualquier caso, está siendo una competición muy igualada, donde cualquier detalle puede decidir los partidos. En ese sentido, creo que la Sarriana es el equipo con mayor potencial en el último tercio del campo.
Ronda doble
P: Con la pandemia de Covid – 19 y su problemática (suspensión de entrenamientos, partidos, cuarentenas…). ¿Cómo has adaptado la preparación física para que el jugador continúe siempre a tono a pesar de estas adversidades?
R (Juan): Pues la verdad es que en ese sentido hemos tenido suerte hasta este periodo invernal, pues no hemos tenido aplazamientos de partidos, de entrenamientos ni cuarentenas, por lo que nuestro planteamiento en ese sentido ha sido el de una temporada normal. La única diferencia la vivimos en pretemporada, donde se notó la diferencia entre los jugadores que habían competido la temporada pasada y los que no; a partir de ahora, todo con normalidad hasta este parón, en el que sí ha aparecido algún caso de algún jugador que se tiene que perder algunas sesiones, algo que seguramente esté al orden del día en muchos clubs.
R: (Marcos) En nuestro caso, la mayor problemática ha sido el largo periodo de inactividad al que han estado sometidos aquellos jugadores que no compitieron el año pasado. Esto se hizo más evidente durante la pretemporada, pero a medida que ha ido avanzando el año se ha ido mitigando, dejando de ser un factor ahora mismo. Por lo demás hemos tenido la suerte de no tener que modificar demasiado la planificación original. Hasta este parón no habíamos tenido ningún caso de covid y tampoco hemos sufrido ningún aplazamiento o cuarentena, lo cuál es muy positivo teniendo en cuenta el contexto actual.
P: ¿Crees que el jugador recibe mejor la preparación física de hoy en día que la de hace unos 15-20 años? ¿Por qué?
R (Juan):Pues supongo que habrá cambios, pero tanto en la física, como en la técnica, táctica o psicológica. Y los cambios no son sólo en el fútbol, también en la sociedad, y los entrenadores debemos adaptarnos a ello. Seguramente muchas veces oímos o pronunciamos la frase “a los jugadores de ahora no les gusta el fútbol como a los de antes”. Y puede que sea cierto en algunos casos, o no, pero debemos entender que a los que entrenamos es a los de ahora, no a los de antes.
Y hoy en día es muy raro que llegue a sénior un jugador que no haya tenido ya buenos entrenadores en base, personas formadas que van a permitir que el jugador llegue ya con una base buena a sénior y que se adapte sin problema a la metodología de trabajo del entrenador.
En el aspecto físico habrá quien te diga que prefiere hacerlo “con balón” y a quien le guste hacerlo de manera más analítica. Personalmente creo que el entrenador debe conocer a su grupo y escoger a partir de ahí la opción más adecuada. Al final, por mucho que se diga, yo creo que los jugadores demandan trabajar, y si se trabaja el jugador acaba respondiendo.
R (Marcos): La preparación física ha evolucionado en busca de una mayor especifidad y creo que el nivel físico y la exigencia son hoy en día muy superiores a hace 15-20 años. La metodología actual prima la fuerza sobre la resistencia como principal capacidad y permite integrar la preparación física dentro del trabajo técnico-táctico, adaptando el perfil del entrenamiento a las situaciones que se van a dar en competición. Aunque puede haber opiniones de todo tipo, creo que este tipo de modelos integrados son, en general, mejor recibidos por los jugadores si los comparamos con los tradicionales modelos descontextualizados.